Esto no para, ahora tendremos mas basura

Hace más de un año, Gersa ponía en el tapete ambiental de nuestra comuna otro ápice negativo, ampliar la capacidad de material (basura) en proceso en la planta que esta empresa tiene instalada en Quilicura. La idea parece responder no sólo al lucrativo negocio en el manejo de los residuos ante la gran demanda de casi toda la capital, sino también a la permisiva actitud de los quilicuranos frente a temas que afectan directamente su calidad de vida, basta recordar como la comunidad no se ha movilizado mayormente en tópicos tan trascendentes como la cantidad de arsénico en el agua que bebemos a diario o la contaminación ambiental de las quemas nocturnas y la emanación de malos olores de empresas apenas a 500 metros de las viviendas. Ante este panorama auspicioso, Gersa arremete sin frenos ni disipaciones hacia la concreción de su ambicioso proyecto, y más aún con una Municipalidad de manos atadas ante esta inminente amenaza y que como un intento de ponerse el parche antes de la herida, citó a los vecinos e integrantes del comité Ambiental Comunal para informarles este asunto de manera más definida con la intención de tomar decisiones y reacciones ante el mismo, sin embargo, la asistencia a este llamado fue como siempre muy escaso, por no decir nulo, según nos informó un vecino asistente los presentes no fueron más de 15 personas, incluyendo al personal municipal. Podemos pensar que la concurrencia se debió a la poca difusión que tuvo esta reunión, también nos podemos excusar en lo incómodo del horario de convocatoria considerando el taco que nos roba 2 horas diarias de tiempo útil, pero lo que no podemos concebir es que la indiferencia total nos provoque como resultado terminar viviendo en un pueblo avasallado física y espiritualmente. Si usted es uno de los vecinos llamados “antiguos” o si llegó hace algunos años y se ha ido enamorando de esta sacudida comuna, le invitamos a informarse, a inquietarse por este tipo de temas aunque sea por amor a las nuevas generaciones.